En el cerebro
Numerosos estudios han comprobado que cuando el cuerpo humano pasa tres días consecutivos durmiendo cuatro horas o menos, mueren neuronas de nuestro cerebro.
No obstante, si pasamos 24 horas sin dormir, nuestro cerebro también lo nota. En este caso lo que ocurre es que el cerebro es incapaz de limpiar las proteínas que forman las placas causantes de enfermedades como el Alzheimer y la demencia. Por tanto, sino dormimos adecuadamente nuestro cerebro no puede protegernos de este tipo de enfermedades.
En el IMC (Índice de Masa Corporal)
Según un estudio llevado a cabo por el equipo de investigadores de la Universidad de Stanford en EEUU, el IMC es un 3,6% mayor en aquellas personas que duermen menos de cinco horas diarias.
En la presión arterial
Dormir menos de seis horas al día también afecta a la presión arterial. La presión arterial sistólica normalmente se encuentra en 120 o por debajo, sin embargo, cuando nuestro cuerpo no descansa lo suficiente puede aumentar hasta 132.
En el estómago
Dormir poco también afecta al estómago, cosa que nunca habíamos imaginado, ¿verdad?
Lo cierto es que dormir menos de cinco horas diarias provoca que la leptina, hormona encargada de producir saciedad y de regular el almacenamiento de grasas disminuya en un 15,5%, lo que conlleva a comer a deshoras y por tanto, aumentar el porcentaje de grasa en nuestro organismo.
En el páncreas
Según un estudio realizado por la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale en EEUU, las personas que duermen seis horas o menos, tienen el doble de posibilidades de sufrir diabetes que aquellas personas que duermen las ocho horas necesarias, independientemente de la edad que tengan o el ejercicio que practiquen.
En los reflejos
Dormir poco afecta bastante a los reflejos humanos. Si pasamos 24 horas sin dormir, tanto nuestro rendimiento cognitivo como nuestro rendimiento motor disminuye y se iguala al de una persona que ha consumido cinco o más copa de alcohol.
Como podemos ver, dormir ocho horas es completamente necesario para poder tener una vida sana ya que la falta de sueño puede perjudicar gravemente a distintos órganos de nuestro cuerpo.