- El alcohol es el medio de escape para muchas personas que sufren ansiedad.
Se puede decir que es la válvula de escape para olvidar la ansiedad mientras duran los efectos, sin embargo es algo realmente contraproducente recurrir a las bebidas alcohólicas si padecemos ansiedad.
Mi experiencia personal:
Recuerdo que cuando tenía ansiedad, me resultaba inevitable dejar de pensar en el mismo problema una y otra vez. Los pensamientos negativos invadían mi mente continuamente y el pesimismo que tenía instalado en mi mente era increíble.
Los fines de semana, no mejoraba la cosa. Es más, tenía más tiempo libre y más tiempo para centrarme en el problema.
Muchas noches tomaba alguna copa, y era el único momento en el que podía dejar de lado la ansiedad. El problema venía al día siguiente, y es que los síntomas eran muchísimo peores que cuando no bebía. Las taquicardias, las sensaciones de rareza… Todo era mucho más grave y me di cuenta que el alcohol actuaba como una montaña rusa.
Te provoca un subidón rápidamente, pero el bajón también es igual de rápido.
Por eso os digo que no debéis beber alcohol para olvidaros de vuestros problemas en general y mucho menos cuando tenéis ansiedad ya que lo único que hacéis es parchear los síntomas mientras dura el efecto del alcohol, y por otro estáis alimentando más aún la ansiedad.